El porche, os deleitará todos los sentidos. El sentido del tacto se verá reconfortado por lo mullidito de los cojines. El oido, por los pájaros o grillos dependerá de la hora... La vista por el pequeño rodal de Cajigas, el cual va cambiando por la estación en la que se encuentre. Y ya por último quedaría el gusto y ahí eligireís o no que degustar en ese porche tan especial. Espero haberos convencido. Os animo a descubrir E l R o d a l.